«Definitivamente hoy el cáncer ya no es sinónimo de muerte»

Así lo sostuvo Everardo Flores Martínez, un notable físico médico mexicano residente de la Universidad de California, San Diego (EEUU), quien participó en una experiencia de intercambio educativo en el Centro Oncológico Integral de Neuquén.

«Hasta hace diez años atrás podían pasar cosas terribles con algunos tipos de cáncer más graves, pero hoy definitivamente cáncer ya no es sinónimo de muerte», aseguró Everardo Flores Martínez, un notable físico médico mexicano residente de la Universidad de California, San Diego (EEUU), quien finalizó una rotación intensiva en el Centro Oncológico Integral (COI), con sede en Neuquén. Hubo intercambio de experiencias, de saberes y abordaje de nuevas técnicas que lideran la lucha contra esta enfermedad.

¿Física médica? Suena como algo complejo tal vez, pero se la puede describir de forma sencilla: es una de las disciplinas que más ayuda, da empuje y sostiene a la salud. Se trata de la aplicación de los métodos de la Física a las Ciencias de la Salud.

Y precisamente ese fue el impulso que llevó a Flores Martínez a volcarse hacia esta disciplina. Estudió Física en México y, consciente de la necesidad de capacitación de más físicos médicos en su país, continuó sus estudios en Estados Unidos.

«Me encanta la idea de que la gente que hace física, que hace ciencia, pueda aplicar sus conocimientos para tener un impacto positivo en la gente. Es la idea fascinante detrás de la física médica, que los conocimientos de ecuaciones, de principios físicos puedan tener un resultado en mejorar la calidad de vida de las personas», contó el experto, de 42 años, quien realizó una maestría y un doctorado en la Universidad de Wisconsin y actualmente cumple el segundo año de residente en Física Médica en la Universidad de California San Diego.

El motor de los físicos médicos

«Es el motor básico en general de los físicos médicos: cómo se pueden usar los principios físicos para optimizar los tratamientos de los pacientes».

Flores Martínez destacó la experiencia educativa que desarrolló en el COI, y se mostró sorprendido por las nuevas técnicas y los sofisticados programas que aquí ya se emplean.

«Me interesaba mucho venir porque Argentina tiene muy buen nombre en Latinoamérica en cuanto a la formación de físicos médicos, y quería conocer la residencia del COI porque en México son más limitadas. Y me encontré con que es muy diferente a la de Estados Unidos y más completa, porque aquí se tiene una visión más integral y el tratamiento es de más alto impacto», relató el profesional.

  • ¿Te encontraste con sorpresas en esta rotación?
  • Sí, me he encontrado unos programas de software que yo no los conocía. Definitivamente no los tenemos en San Diego, y es interesante porque la Universidad de San Diego está muy interesada en tratar de predecir qué es lo que se viene. Y una de las cosas en que estamos convencidos es que la automatización, la inteligencia artificial, va a tomar mucha mayor preponderancia en la clínica. Y entonces sabíamos que había programas que iban a permitir la automática identificación de lesiones, de localizar ciertos órganos en el cuerpo, se sabía que ya se podía hacer pero no está en la práctica clínica generalizada. Y cuando llegué aquí me di cuenta que ya está listo. Se está trabajando con los programas de software que son capaces de realizar eso. Y eso es el futuro.

El impacto de las nuevas técnicas y el avance de la ciencia en la lucha contra el cáncer «es diversificado aún porque hay sitios desafiantes en que hasta la fecha no se han logrado los resultados que se quisieran, pero hay otros en los que el porcentaje es muy alto, donde hasta un 90 % el nivel de supervivencia se ha alcanzado. Hay áreas donde se va ganando por mucho y en otras todavía falta. Pero definitivamente hoy el cáncer no es sinónimo de muerte. Hay cánceres que son 90% curables o hasta más con las técnicas de tratamiento», destacó el físico médico mexicano.

El doctor en Física Médica Everardo Flores Martínez en el COI.

Si no hay dinero para la ciencia «hay que salir a golpear puertas»

«Hoy la tendencia es que se busquen acuerdos con las diferentes empresas proveedoras de software, de hardware, y que de allí se empiece a generar investigación. No solo podemos esperar programas gubernamentales para ver qué se puede hacer, claro que sería ideal tener mucho más apoyo del gobierno, pero la filosofía aquí es no detenernos y salir a golpear puertas», compartió Everardo Flores Martínez, en su visita al COI.

«Yo tenía mucho esta visión que también tenemos en México, que la investigación viene por parte de que el gobierno dé incentivos y entonces hacemos investigación. Pero lo que aprendí en Estados Unidos es que los centros, debido a la actividad y el reconocimiento que tienen, pueden hacer convenios con empresas y en ese caso, porque las empresas grandes están interesadas en que sus productos se usen bien, entonces se pueden hacer proyectos de investigación, se pueden generar convenios y apoyos de parte de las instituciones para hacer cosas de muy buena calidad», consideró.

En el COI, una residencia en física médica de avanzada


“El físico médico vendría a ser el conector entre la física médica y la tecnología con la medicina”, explicó Ricardo Ruggeri, director de Física Médica del COI y la Fundación Médica de Río Negro y Neuquén.

En esta institución se creó la primera residencia en Física Médica de la Patagonia y el objetivo principal es que el Centro Integral Oncológico (COI) -integrante del grupo Leben Salud siga siendo uno de los principales centros de referencia de educación para esta región del país.

“Seguimos las recomendaciones del organismo internacional de energía atómica, este organismo sacó un documento que es un reporte hecho por expertos de cómo tiene que ser una formación. La tendencia no es a una especialización en un área, sino que hagas una residencia más extensa donde tenés que ver todas las áreas porque ese es el futuro del físico médico”, sostuvo Ruggeri.

Compartí