¿Alergias en otoño? ¡Ojo con los ‘alérgenos indoor’!

Ácaros y otros alérgenos que se encuentran dentro de la casa deben preocupar tanto a aquellos que sufren de las molestas alergias, como a los que no. La combinación de ambientes cerrados, calefacción y falta de ventilación puede traer serios dolores de cabeza con la llegada de la próxima estación.
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Silvana Salinas
La llegada del otoño significa mucho más que tiernas hojas amarillas cayendo de los árboles y paisajes que arrancan suspiros. Trae cambios en el clima (¡todavía más! si es posible), los primeros y más marcados descensos de temperatura y, si bien ya los restos del polen primaveral desaparecieron, las alergias pueden irrumpir y llenar de sorpresas a más de uno.
«En ciertos grupos de pacientes alérgicos pueden iniciarse síntomas o exacerbarse con el otoño», advierte el especialista en alergias, Pablo Fasano.
«Puntualmente hablamos de pacientes con manifestaciones respiratorias como la Rinitis Alérgica Persistente (estornudos,secreción acuosa, picazón nasal, obstrucción nasal), Rinoconjuntivitis alérgica (ojo rojo, lagrimeo, picazón) y Asma Bronquial», explica. Aunque también pueden exacerbarse los eczemas en piel como la dermatitis atópica.

En el mundo, 1 de 4 pacientes padece algún tipo de alergia.
«No sólo hay alergias en primavera al polen de las flores de plantas, sino también a alérgenos dentro de la casa, denominados ‘indoor’ o intramuro, como por ejemplo los ácaros», resalta el ex-presidente de la Sociedad de Asma, Alergia e Inmunología del Sur (SAAIS) y miembro de la Junta Ejecutiva y Órgano de Fiscalización de la Asociación Argentina de Alergia e Inmunología Clínica (AAAeIC).
Si bien estos “alérgenos” o “partículas” que causan alergia se encuentran presentes todo el año, «con la llegada del otoño nosotros permanecemos más tiempo en los hogares, oficinas, en espacios cerrados, con la calefacción encendida, lo que contribuye como condición a una mayor humedad ambiente y temperatura constante, que le dan a los ácaros posibilidades de sobrevivir y reproducirse».
Además, dentro de casa y junto con la combinación de un mayor encierro y menor ventilación de los ambientes se generan mohos u hongos ambientales como la alternaría, cladosporium, penicillium, entre otras, que afectan la salud.
En cuanto a las mascotas, agrega Fasano, cuando conviven dentro del hogar en algunos pacientes también son responsables de enfermedades alérgicas respiratorias.
Polen en el aire
Si bien el cambio de estación puede significar de gran alivio para algunos, el alergista hace hincapié en que «también en otoño podemos encontrar pólenes en el aire que respiramos».
La variedad de plantas que polinizan en esta época, inclusive en la región valletana, son de la familia de las malezas y quenopodeaceas (plantago lanceolata, ambrosia, amaranthus, quenopodium) y el viento favorece a su transporte y distribución en la región.
También el incremento de las lluvias en otoño ayuda a la proliferación de mohos entre las hojas caídas de los árboles generando síntomas en pacientes alérgicos a los mismos.
«Las alergias no excluyen edades, sexo ni raza», destaca Fasano, «pero vale la pena comentar que los niños pequeños sufren más la exposición a estos alérgenos indoor, o dentro de casa, porque pasan más tiempo dentro de los hogares ya que no están aún escolarizados, ni realizan actividades de esparcimiento o deportivas al aire libre como lo hace un niño mayor, adolescente o adulto».
Se ven acentuadas entonces, en esta época del año, las patologías de vía aérea superior e inferior como las bronquiales o asma. Con un factor agravante que, por si fuera poco, se suma: las infecciones respiratorias virales y bacterianas propias de la época de las estaciones frías.
Respecto a cómo tratar estas alergias «es importante tomar conciencia de que en medicina la toma de medidas de prevención son el mejor comienzo para comenzar un tratamiento», aconseja el especialista de la región.
Valen, en este escenario, algunas recomendaciones específicas y sencillas: ventilar los ambientes por unas horas abriendo sólo una luz de la ventana, no calefaccionar en demasía los ambientes, no tener alfombras, juguetes de peluches, ropa de cama de material pluma, y en lo posible que las mascotas no ingresen ni utilicen la cama de sus dueños.
También es recomendable lavar la ropa de cama a 60 grados, plancharla, cambiarla dos veces por semana, usar cobertores de colchón y almohada.
Consulta al especialista
Luego un especialista en alergia, de acuerdo a estudios o pruebas de alergia positivas a ese alérgeno, realizará un tratamiento puntual «como la inmunoterapia específica con el alérgeno causal o vacuna que consiste en la aplicación creciente de ese antígeno o alérgeno vía inyectable u oral, cuyo fin es minimizar esa respuesta alérgica a través de un mecanismo donde se genere tolerancia o inmunidad contra el mismo», detalla Fasano.
Como también se pueden utilizar, según cada caso, medicaciones sintomáticas y preventivas como los antihistamínicos orales, glucocorticoides tópicos vía inhalatoria nasal/ bronquial, antileucotrienos etc. Así es que, básicamente la alergia también puede ser un problema de la época otoñal.
Ránking.
Las alergias más comunes por cambio de estación:
Rinitis alérgica. Reacción de las membranas de la mucosa de la nariz después de una exposición a ciertos alérgenos, como el polvo o el polen.
Asma. Puede ser producido por alérgenos como ácaros, pólenes, epitelios de animales, hongos o alimentos.
Alergias a mascotas. Principalmente en ambientes encerrados, sin suficiente ventilación. Hace que sea más probable que aparezcan alergias a la caspa de los animales.
Dermatitis atópica. El otoño en sí mismo no tiene por qué empeorar sus síntomas, pero el uso de lana o el frío, entre otros factores, puede hacer que la piel se descame e irrite.
En pocas palabras
Las enfermedades alérgicas son procesos frecuentes que afectan a muchas personas; no sólo niños y jóvenes sino también adultos.
La OMS ha llegado a clasificar las enfermedades alérgicas entre las 6 patologías más frecuentes, según datos de Fundaler.